Especialistas de Estados Unidos y de Cuba se reunieron en La Habana para hablar sobre fórmulas con las que garantizar el saneamiento y la rehabilitación ambiental de la zona de Matanzas que quedó devastada por el incendio de varios macrotanques de combustibles.
En este encuentro, participaron trabajadores de la Agencia para la Protección del Medio Ambiente de Estados Unidos (EPA, por sus siglas en inglés), según un comunicado del Gobierno cubano.
La cita transcurrió “en un ambiente profesional y de provechoso intercambio”, en opinión del Ministerio de Exteriores de la isla, y en él se consultó a los especialistas norteamericanos su opinión sobre las acciones que ya estaban en marcha y la posibilidad de tener acceso a técnicas “más novedosas”.
Esta colaboración contrasta con los recelos políticos que siguen manteniendo Cuba y Estados Unidos, después de que la etapa de Donald Trump en la Casa Blanca diese carpetazo al acercamiento emprendido durante el mandato de Barack Obama. La Administración de Joe Biden no ha dado muestras de grandes cambios.
El incendio de Matanzas, originado por la caída de un rayo, provocó 16 fallecidos y 146 heridos. De estos últimos, 15 siguen hospitalizados, según un balance divulgado este viernes por el Ministerio de Salud Pública cubano.