Las autoridades españolas entregaron el jueves a Estados Unidos (EE. UU.) a Claudia Patricia Díaz Guillén, la exenfermera y extesorera de Hugo Chávez (1999-2013), quien era reclamada por las autoridades estadounidenses por presunta conspiración para cometer blanqueo de dinero y blanqueo de instrumentos monetarios.
Según información citada por el diario ABC de España, Díaz fue trasladada en un vuelo hasta Miami, donde será presentada este viernes 13 de mayo ante un juez de West Palm Beach.
En noviembre de 2021 la Sala de lo Penal de la Audiencia Nacional ratificó la decisión de entregar a Díaz Guillén a EE.UU., solicitada por el Tribunal Federal del Distrito Sur de Florida por delitos de blanqueo y organización criminal en el contexto de una trama que habría tenido como beneficiario al empresario Raúl Gorrín.
Díaz también estaría implicada en un negocio ilegal de canje de divisas que habría reportado beneficios millonarios tanto a ella como a su esposo Adrián Velásquez, quien fue jefe de seguridad de Chávez.
Velásquez no ha sido entregado aún a Estados Unidos a pesar de que la Audiencia Nacional consideró en noviembre de 2021 que en el caso del exguardaespalda de Chávez se cumplen todos los requisitos necesarios para aprobar la extradición.
Según la demanda de extradición citada por ABC, Díaz Guillén usó cuentas bancarias cuyos titulares eran empresas ficticias y “disfrazó numerosos pagos de sobornos” que eran en su beneficio aunque se dirigían a su esposo.
Guillén desempeñó funciones en la Oficina Nacional del Tesoro de Venezuela entre 2011 y 2013.
Desde esa oficina administraba un fondo multimillonario, Fonden, creado para depositar los ingresos producto de las exportaciones de petróleo. Sin embargo, según el medio español, desde allí se manipulaban transacciones de cambio con moneda extranjera para personalidades afines al gobierno venezolano a tasas favorables a cambio de cuantiosos sobornos.
Durante esos tres años al frente de Fonden, Díaz Guillén habría amasado una fortuna que asciende a millones de dólares, razón por la cual la Fiscalía de Venezuela también la reclama y la acusa de haber recibido ayuda del bufete Mossack Fonseca para “blindar” una fortuna no declarada y fruto de la sustracción de dinero público.