El gobierno estadounidense presentará en los próximos días nuevas normas para controlar las armas de fuego de fabricación privada sin número de serie que aparecen cada vez más en las escenas del crimen, informaron a The Associated Press tres personas familiarizadas con el asunto.
La finalización de las normas sobre las llamadas “armas fantasma” se produce en un momento en el que la Casa Blanca y el Departamento de Justicia están sometidos a una presión creciente para tomar medidas contra las muertes por armas de fuego y los delitos violentos en Estados Unidos.
La Casa Blanca también ha estado sopesando la posibilidad de nombrar a Steve Dettelbach, un exfiscal de Ohio, para dirigir la Oficina de Alcohol, Tabaco, Armas de Fuego y Explosivos, dijeron las fuentes. El presidente Joe Biden tuvo que retirar el nombramiento de su primer candidato, el defensor del control de armas David Chipman, después de que el nombramiento se paralizara durante meses debido a la oposición de los republicanos y algunos demócratas en el Senado.
Durante casi un año, las normas se han ido abriendo paso en el proceso de regulación federal. Los grupos pro-seguridad de armas y los demócratas del Congreso llevan meses presionando para que el Departamento de Justicia termine la normativa, aunque es probable que se enfrente a fuerte resistencia y litigios por parte de los grupos de defensa de las armas.
El momento exacto del anuncio no se ha fijado, dijeron las fuentes.
El domingo, el líder demócrata en el Senado, Chuck Schumer, imploró al gobierno que actuara con mayor rapidez.
“Ya es hora de realizar un exorcismo de las armas fantasma antes de que la proliferación llegue a su punto álgido, y antes de que más personas resulten heridas, o algo peor”, dijo Schumer en un comunicado. “Mi mensaje es sencillo: No hay que esperar más sobre estas normas federales propuestas”. Las armas fantasma son “demasiado fáciles de construir, demasiado difíciles de rastrear y demasiado peligrosas para ignorarlas”.