El ministro español de Asuntos Exteriores, UE y Cooperación, José Manuel Albares, aseguró este viernes que el Gobierno del país ibérico carece de “deseo o inclinación” sobre el futuro de la Presidencia de Venezuela y volvió a reivindicar el diálogo “de los propios venezolanos” como única solución posible a la crisis que atraviesa el país sudamericano.
Albares sostuvo que la postura de España “es muy clara” al respecto e hizo hincapié en que “todos los esfuerzos de diálogo, como el de México, nos parecen bien”. “Sin condiciones, sin decirles qué escoger”, matizó.
“Por eso nosotros hablamos con todas las partes, con Gobierno y oposición. España no tiene un deseo en que el presidente de Venezuela sea una u otra persona“, aseveró antes de abordar la posibilidad de que el opositor Leopoldo López sea extraditado, tal y como solicitó el Gobierno del presidente venezolano, Nicolás Maduro.
“Son procedimientos judiciales que siguen su cauce habitual. No son decisiones que se toman así como así (…). El Gobierno se pronunciará cuando tenga que hacerlo“, manifestó el jefe de la diplomacia española.
Albares, que expresó que América Latina “no son solo tres países” sino “muchos más”, se refirió también a la situación en Nicaragua y manifestó que, en su opinión, “no ha habido elecciones en el país”, un proceso al que calificó por contra como “burla a la democracia”.
“El mismo día de la toma de posesión de (Daniel) Ortega, si se le puede llamar así, recibía a la esposa de uno de los presos políticos“, recordó. “Exigí una vez más la liberación de todos los presos políticos que hay en el país. No es camino a seguir“, afirmó antes de subrayar que “España alzará la voz” para lograr su puesta en libertad.
