El Gobierno de Estados Unidos subrayó que el periodo para lograr reactivar el acuerdo nuclear de 2015 es “de semanas, no de meses”, en medio de las conversaciones en Viena entre las partes para lograr el retorno de Washington al pacto y que Teherán cumpla todos sus compromisos.
El portavoz del Departamento de Estado estadounidense, Ned Price, resaltó que el margen “es muy, muy corto”. “No hablamos de un periodo prolongado de tiempo. Estamos hablando potencialmente de semanas, no de meses”, señaló.
Sin embargo, rechazó nuevamente “poner una fecha en el calendario y decir que este es el límite”. “No es un reloj en una cuenta atrás. Es un reloj basado en un calendario fundamentado en valoraciones técnicas”, indicó durante su rueda de prensa diaria.
“Miramos una ecuación muy simple. Cuando los beneficios de la no proliferación garantizados por el acuerdo nuclear (…) superan los avances que Irán ha hecho en su programa nuclear desde que empezó a violar los límites en su programa nuclear y los límites fijados después de que la última Administración (de Donald Trump) se saliera del acuerdo”, explicó.
“Esa es una valoración que se fundamentará en una serie de asuntos que se pueden comentar públicamente y en privado sobre los avances (iraníes) y sus implicaciones en asuntos como el tiempo que queda para que Irán se haga con suficiente material fisible para producir armas nucleares, si deciden avanzar en esa dirección”, sumó.
En este sentido, Price incidió en que Washington “sigue buscando un retorno mutuo al cumplimiento del acuerdo nuclear”. “Creemos que un retorno mutuo al cumplimiento va en línea con los intereses de seguridad nuclear de Estados Unidos y los de nuestros aliados y socios”, sostuvo.
“Podemos hablar por esta Administración y esta Administración ha sido muy clara, como se ha visto en comunicados formales. Estamos preparados para volver al cumplimiento total del acuerdo nuclear y mantenernos mientras Irán haga lo mismo”, apostilló.
