La firma inglesa de inteligencia financiera Grupo Emfi pronosticó esta semana un crecimiento del 6,2% en la economía de Venezuela luego de ocho años de caída de su producto interno bruto.
“Nuestro análisis de base amplia de la data económica disponible nos llevó a modificar nuestro pronóstico de crecimiento del producto interino bruto (de Venezuela) para 2021 a 6,2%, del previo 2%”, apunta un informe sobre el país sudamericano publicado el miércoles pasado por EMFI, una compañía británica de servicios financieros con enfoque en los mercados emergentes globales.
El pronóstico de la empresa europea se conoce luego de que Venezuela registrara una caída acumulada del 90% de su producto interno bruto entre 2013 y 2020, que representa “la más grande en la historia del capitalismo”, según valoraciones de economistas locales como Manuel Sutherland.
El país completará en noviembre cuatro años seguidos en hiperinflación, es decir, de un aumento exacerbado de los precios de bienes y productos. Si bien desaceleró en septiembre, con el 9,7%, la inflación nacional de los últimos 12 meses es de 1.456%, según el opositor Observatorio Venezolano de Finanzas (OVF).
Signos de recuperación
Emfi nota en su reporte signos de recuperación, sin embargo. El valor de las exportaciones petroleras de Venezuela subieron en los primeros nueve meses de 2021 un 55,2% en comparación con el mismo período del año pasado, precisa. “Cerraría al alza en 57,7% en todo el año si se mantiene la tendencia”, acota.
La industria petrolera es la quintaesencia de la economía venezolana desde la segunda década del siglo XX. Según el gobierno de Nicolás Maduro, esa actividad representa más del 90% de los ingresos del Estado.
Las operaciones petroleras se complicaron por la crisis económica desde 2013 y se agravaron por las sanciones aplicadas por Estados Unidos a partir de 2017 contra empresas e instituciones financieras ligadas al poder ejecutivo nacional, coinciden economistas, sindicatos y empresarios privados del país.
“El crecimiento en 2021 no debería ser sorpresa dado el efecto base relacionado con el covid-19, los fuertes ‘vientos de cola’ internacionales y la continua dolarización informal y la liberalización de la economía”, apunta Emfi.
En economía, el término “vientos de cola” suele usarse para describir cuando una dinámica o situación en particular genera un efecto de mayores ganancias o crecimiento a determinado individuo, sector o Estado.
Emfi dice notar que los precios extremadamente altos del petróleo, una mayor cantidad de remesas y un “pequeño renacimiento de la actividad del sector privado” resultan en un “probable mejoramiento del bienestar doméstico” en Venezuela.
Inflación “parece estar disminuyendo”
La firma observa asimismo que la inflación venezolana “parece estar disminuyendo”, si bien augura que “permanecerá muy alta este año”. Agrega que las transacciones en la moneda local, el bolívar, parece ser cada vez “menos relevantes” en la evolución macroeconómica del país.
Cita una encuesta del OVF que reveló, en febrero pasado, que el 46% de los trabajadores ganaban sus salarios en divisas, lo que significa un incremento de 17,4% en comparación con 2020. “El dólar ha reemplazado al bolívar para las transacciones minoristas diarias”, complementa.
Emfi hace referencia a la falta de datos económicos oficiales y actualizados en Venezuela, pero remarca que los indicadores producidos por sectores privados, como bancos u otros actores monetarios, ofrecen “signos significativos que apuntan al crecimiento” financiero en el país de 28 millones de habitantes.
El informe menciona también la encuesta de la organización gremial venezolana Conindustrias, que muestra que el 49% de sus afiliados reportaron el incremento en la producción de sus compañías en comparación con el año 2020 y que el 52% de los consultados esperaba que ese indicador continuara al alza.
El presidente Nicolás Maduro ha insistido en que Venezuela atraviesa un momentum de recuperación económica a pesar de lo que califica como “bloqueo y secuestro” de los recursos del Estado por parte de gobiernos extranjeros. La oposición, sin embargo, rechaza esa tesis advirtiendo que Venezuela sigue sumida en una profunda crisis económica que, a su juicio, solo se resolverá cuando se zanje la problemática política y electoral.
El reporte de la firma inglesa coincide con la reciente publicación de la Encuesta Nacional de Condiciones de Vida, que refeja que hasta 95% de los hogares venezolanos vive en pobreza.
La pobreza extrema en Venezuela se elevó de 67,7%, en 2020, a 76,6% en la última edición, indicó el sondeo, publicado hace una semana.
Optimismo por las negociaciones en México
La firma Emfi también dice haber notado un optimismo creciente por las negociaciones en México entre el gobierno de Maduro y su oposición, con “algunos actores de mercado” creyendo que el proceso podría llevar a la flexibilización de las sanciones o una normalización relativa de la política.
“Esta es una opinión que no compartimos. Nuestra interpretación es que Maduro negocia por una posición de poder, mientras la oposición luce incrementalmente débil y dividida. De hecho, dos miembros de la coalición política del G4 han tenido una disputa muy pública por una controversia sobre el manejo de los activos de Venezuela en el exterior”, reza el informe.
VOA.