Indicadores de inflación en Venezuela mantienen tendencia a la baja: estas son las razones

Archivo.

Lejos de las desalentadoras cifras de 2018 y 2019, cuando en Venezuela estallaba una “depreflación”, el panorama económico de 2021 en la nación sudamericana parece tener una luz al final del túnel.

La tendencia de los indicadores de inflación es claramente a la baja: según las cifras del Banco Central de Venezuela (BCV), enero cerró con una inflación de 46,6%; febrero con 33,8%; marzo con 16,1%; abril con 24,6% y mayo con 28,5%.

Los gestos de apertura del gabinete económico surtieron efecto. Y aunque todavia no se avizora el fin de la hiperinflación que comenzó en 2017, definitivamente hay una notoria recuperación.

“Inflación baja en junio. Muy baja si comparamos con lo que hemos padecido en tres años”, dijo en Twitter Luis Oliveros, un destacado economista opositor.

Pero hay razones que justifican la argumentación de Oliveros. El desmontaje de vetustos e inoperantes controles; la libre circulación del dólar (dolarización de facto); la política monetaria de índole restrictiva y los incentivos a las importaciones terminaron por detener (aunque no eliminar) el ciclo recesivo y la hiperinflación.

La prestigiosa firma Creddit Suisse ha tomado nota de estas variaciones en el modelo económico del gobierno, pronosticando un “crecimiento” del Producto Interno Bruto al cierre de 2021.

En cambio, la firma local Econométrica mantiene su pronóstico de contracción a 5 puntos, pero muy lejos de la contracción de hasta 26 puntos de 2020, cuando la pandemia agudizó la crítica situación del país, que tiene un PIB de apenas 50 mil millones de dólares.

Precisamente los sectores terciarios y profesionales de la economía, así como la política monetaria de recorte de la disponibilidad de bolívares circulante, se han combinado para que las variaciones del Índice de Precios al Consumidor (IPC) muestren una recuperación progresiva.

El economista Alejandro Sánchez (Econométrica) anticipa que la ejecución fiscal del gobierno en el próximo semestre (con elecciones regionales en noviembre) será clave para determinar el comportamiento de la inflación. Cualquier inyección de bolívares se trasladará a los precios y al tipo de cambio.

Por otra parte, la circulación de dólares, que multiplica por cinco la cantidad de bolívares en el sistema, también ha dado un importante impulso a las transacciones de los agentes económicos.

Recientemente, el gobierno anunció la apertura de cuentas bancarias en dólares con cambio en bolívares al tipo de cambio oficial, que se mantiene cercano al paralelo.

La medida facilita las transacciones de compra y venta de productos y servicios, puesto que la circulación de dólares de baja denominación ha sido un cuello de botella a la hora de los pagos en comercios.

“Es una medida positiva”, dijo Oliveros en su cuenta Twitter.

El fin de la crisis se acerca y el gobierno parece dispuesto a dictar más medidas de apertura en los próximos meses.

Previous Article

Un nuevo virus se hace paso en USA mientras se relajan las medidas por la covid-19

Next Article

Hallan dos nuevos cuerpos entre los escombros del edificio de Miami

Related Posts