Un estudio publicado por The American Journal of Cardiology reveló recientemente que una persona podría evaluar si sufre de aneurisma aórtico ascendente mediante una sencilla prueba física con la mano.
La persona solo deben extender la mano con la palma hacia arriba y alargar el pulgar en dirección al dedo meñique. Si el dedo cruza el borde de la misma, podría tratarse de un signo de aneurisma aórtico.
La principal causa sería que los huesos largos del paciente están muy estirados y las articulaciones están laxas, lo que indicaría una enfermedad del tejido conectivo, según la investigación de la Universidad de Yale.
El grupo descubrió que los pacientes con resultados irregulares en el test en diversas ocasiones padecían de aneurisma aórtico, cuya complicación que podría ser fatal para la persona.
Basados en 305 pacientes sometidos a cirugías cardíacas por aneurisma ascendente, reparación de válvulas o injerto de derivación de la arteria coronaria, los investigadores señalaron que las personas con resultado irregular tienen una “alta probabilidad de albergar un aneurisma”.
