Los datos de una nueva investigación sugieren que los cambios relacionados con el envejecimiento en las células madre y los vasos sanguíneos del cerebro son más pronunciados en los animales machos. Las posibles causas de estas diferencias por sexo, como las influencias hormonales o genéticas y su impacto en la función cerebral y las enfermedades relacionadas con el envejecimiento, requieren una mayor investigación.
El envejecimiento y las enfermedades cerebrales relacionadas con la edad no afectan de la misma manera a mujeres y hombres. El cerebro adulto genera constantemente nuevas células cerebrales llamadas neuronas a partir de células madre, un proceso llamado neurogénesis. Este proceso es importante para el aprendizaje y la función cognitiva, que disminuye a medida que el cerebro envejece.
La neurogénesis se ha estudiado ampliamente en animales, pero la mayoría de los estudios se han centrado en los machos, lo que plantea la cuestión de si el declive de la neurogénesis relacionado con la edad afecta a ambos sexos de la misma manera.
Para abordar esta cuestión, los investigadores Sally Temple, Kristen Zuloga, y sus colegas del Instituto de Células Madre Neurales de Nueva York (Estados Unidos) han comparado ahora las regiones cerebrales neurogénicas en ratones machos y hembras en un estudio publicado en Stem Cell Reports.
Vasos sanguíneos anormales
La investigación se centró en los vasos sanguíneos, que se sabe que regulan la actividad de las células madre cerebrales y guían la migración de las neuronas recién nacidas en el cerebro. Inesperadamente, los vasos sanguíneos de forma anormal y mayor densidad eran abundantes en los ratones machos envejecidos, pero mucho menos en las hembras.
Además, las células madre del cerebro eran menos frecuentes y tenían menos contacto con los vasos sanguíneos en los ratones macho envejecidos en comparación con las hembras. Los investigadores descubrieron que, aunque el número de neuronas recién generadas era comparable entre ambos sexos, la migración de las neuronas recién nacidas, un proceso en el que las nuevas neuronas se desplazan por caminos predefinidos hasta su zona de destino en el cerebro, estaba mucho más desorganizada en los ratones macho envejecidos en comparación con las hembras.
Esta diferencia podría atribuirse al mayor porcentaje de vasos sanguíneos distorsionados encontrados en los machos envejecidos. En conjunto, estos datos sugieren que los cambios relacionados con el envejecimiento en las células madre y los vasos sanguíneos del cerebro son más pronunciados en los animales machos.
Las posibles causas de estas diferencias por sexo, como las influencias hormonales o genéticas y su impacto en la función cerebral y las enfermedades relacionadas con el envejecimiento, requieren una investigación más profunda.